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El hecho de que una persona cuente con varias identidades en su ser llevo a que las marcas a dejar de ver a sus consumidores como una masa homogénea. Un músico puede ser un amante del running, o un geek del laboratorio puede ser un tenista en potencia… y las marcas lo están empezando a ver. Están empezando a crear prendas, productos y conceptos para cada uno de estos subsegmetos que conforman su mercado. Una marca que está comenzando a sacar provecho de este concepto es Adidas. 

Por primera vez en su historia en el 2011, la marca de indumentaria deportiva alemana introdujo el pop y el estilo de vestimenta urbana a su gama de productos. Este nuevo concepto que apoya Adidas fue conocido a través de la campaña “All in”, donde se pudo ver a cantantes, rappers y deportistas vistiendo la marca en un sinfín de situaciones diferentes, pero todos conectados por ese momento que la marca bautizó como “all in”. Este concepto capta el momento en que las personas dejan de ser quienes son para dar lo mejor de sí en lo que están haciendo, el momento en que están 100% conectados con lo que están haciendo. 

En el 2012, la marca vuelve a apostar al mismo concepto, pero agregándole un ingrediente. En esta oportunidad Adidas pretende demostrar que en este preciso momento, alguien esta “all in” en algún lugar del mundo. Esta nueva face de la campaña se conoce como "We all Run". Al igual que en la etapa previa, la marca se apoya sobre la imagen de una serie de famosos como David Beckham, Lionel Messi, Derrick Rose y Katy Perry en ciudades tales como Buenos Aires, Chicago, Los Angeles, Barcelona y Londres. 

A nuestro entender el concepto sobre el cual se apoya la marca está bien pensado, pero al spot le falta fuerza. Las personalidades que aparecen en el comercial le dan color, pero no fuerza. El storyline va demasiado lento para un comercial que se centra sobre el concepto de “All in” según nuesta opinión.